De manera similar a como fluctúan los cambios en el modelo económico, es importante identificar claramente los puntos de inflexión que producirán cambios en tu vida personal y profesional, ya que son situaciones o circunstancias en las que nuestra vida toma un rumbo diferente, decisiones que pueden determinar o marcar nuestra vida, para bien o para mal.
Lo importante es saber que nada dura para siempre y que especialmente, estos puntos de inflexión, son solo espacios pequeños de tiempo que debemos manejarlos de manera inteligente, para sacarles el mayor provecho, sea que estemos en la cima o en el fondo.
Cuando estamos en el punto Éxito, es momento de mirar en perspectiva, de guardar reservas, de retomar energía, de hacer planes de soporte que nos den un poco de tranquilidad en caso de que cambien las cosas, y esto es lo más seguro. Es momento de plantearse nuevos objetivos, nuevos desafíos que nos llenen de profunda satisfacción y que cuyos logros sean los motores de vida que nos empujan a seguir adelante, a seguir viviendo con tanta pasión que seamos capaces de irradiar verdaderas fuentes de luz.
En cambio, cuando estamos en el punto Depresión, es momento de cuestionar tu forma de vida, hacer los ajustes necesarios a las estrategias de vida o de plano, borrón y cuenta nueva, de tomar decisiones y recopilar e interiorizar todos los aprendizajes, piensa que ya no hay nada más que perder, así que, es un buen momento para empezar desde cero con nuevas fuerzas, dando giros positivos que nos acerquen a donde realmente queremos estar. En este punto, la herramienta clave es la ACTITUD con que tomas las cosas, porque de ello depende que puedas salir del punto de fondo con un impulso renovado y llegar más alto o salir con una actitud perdedora, pesimista con la vida y dirigirte a situaciones que van a seguir atrayendo circunstancias negativas.
Estos puntos nos obligan a salir de la zona de confort y si bien, es algo más fácil salir del punto de inflexión de Éxito, a veces es más provechoso salir del punto Depresión, porque, si se lo enfrenta con la actitud adecuada y se canaliza la energía dándole un norte, es más probable que lleguemos más lejos de lo que imaginamos.
Como mujeres, en muchas ocasiones enfrentamos estos puntos de inflexión de manera más intensa, tanto en la vida personal como profesional, sin embargo, no por ello vamos a bajar los brazos, al contrario, esto debe generarnos la confianza de saber que vamos a enfrentar con asertividad y cierta serenidad estos pequeños espacios de tiempo, sabiendo que son momentáneos y que de nosotras depende tomar acciones que nos acercarán cada vez más a los éxitos planteados.
Podemos verlos como puntos necesarios para hacer un alto, a veces, por el ajetreado ritmo de vida que llevamos, la vida misma se encarga de ponernos al límite, empujándonos a tomar acciones de cambio.
En general, debemos estar claras que siempre vamos a salir de los puntos de inflexión, no vamos a permanecer allí mucho tiempo. Siendo así, la única opción es tener claros los objetivos en la vida y ser tan flexibles para ser capaces de hacer ajustes y tomar las decisiones asertivas que nos lleven a la vida que queremos vivir.
Y Tú? como manejas el paso por estos punto de inflexión para manejar adecuadamente los cambios en tu vida?