Trabajar por un propósito mayor

Cuando te enfocas en trabajar por un propósito mayor, sea en tu vida personal o profesional, es como que todo tiene más sentido, te sientes útil, satisfecha con lo que haces y con lo que hiciste aunque hayas realizado un gran esfuerzo. Sientes que eres productiva, que has aprovechado el día y sientes que todo vale la pena. Una ola de optimismo y positividad te rodea.

Trabajar por un propósito

Trabajar por un propósito mayor

Pero qué pasa cuando trabajas y trabajas sin parar y sientes que no vas a ningún lado? Cuando haces informes inmensos que nadie lee, cuando haces una tarea que implicó mucho esfuerzo para que al final te digan que no es lo que quieren, sientes una frustración tremenda, por eso es vital tener claras las actividades que vas a realizar y sobre todo lo que vas a lograr con esa actividad, es decir, averiguar cómo contribuye a un objetivo más grande.

Me gustaría contarte una fábula donde se visualiza claramente la diferencia de hacer las cosas por hacer o hacerlas con un significado.

Entrevistaron a 2 personas que estaban trabajando en el mismo proyecto de construcción. Cuando le preguntaron al primero, qué estaba haciendo? Este contestó, estoy moviendo piedras, en este intenso calor, poniendo cemento y levantando paredes, ese es mi trabajo.

El segundo en cambio contestó, estoy levantando la iglesia más importante de la comunidad, donde todas las personas podrán venir a orar y donde se sentirán en paz.

 Cuando las personas entienden el verdadero significado de lo que hacen, empiezan a trabajar diferente, con más pasión y con más conciencia de que si se demoran, puede impactar el trabajo del compañero o peor aún, retrasar la entrega de un gran proyecto que puede representar multas o problemas graves a la organización.

Como mujeres modernas, sentimos con más fuerza la necesidad de ser productivas, no podemos perder ni un minuto de tiempo dedicándolo a actividades sin propósito, por eso es más importante que perfeccionemos la comunicación con nuestro equipo de trabajo y superiores o socios para poder planificar bien las actividades diarias, priorizarlas y al final del día hacer un resumen de cuánto avanzaste y contribuiste al objetivo mayor, a la iglesia que estás levantando, al ascenso tan soñado, al proyecto que marcará la diferencia en tu vida profesional o como emprendedora. Esto, al contrario de lo que podemos pensar, te dará más energía para continuar el siguiente día, viendo en perspectiva tu vida y los pasitos que vas dando hacia tu ideal.

A continuación, te doy las 5 claves que debes fomentar en ti y en tu equipo de trabajo para obtener mejores resultados:

  1. ENTENDER EL SIGNIFICADO.-Asegurarte de entender y comunicar bien el objetivo mayor que se quiere lograr
  2. TRAZAR EL PLAN.-Elaborar junto a tu equipo de trabajo un plan realista pero retador que incremente todos los días un avance para conseguir el objetivo mayor en la fecha definida. El involucrarles en el proyecto les dará un sentido de pertenencia y compromiso
  3. MONITOREAR EL AVANCE DEL PROYECTO.- Haz seguimiento, conversa con todos los colaboradores del equipo, visita sus puestos de trabajo, dales una ayuda si es preciso, que sientan que tú estás en el barco junto a ellos porque te importa lo que hacen, porque todos están trabajando para conseguir el objetivo mayor.
  4. REALIZAR AJUSTES SI ES NECESARIO.- Si en el camino encontramos fallas, riesgos no inesperados, situaciones no planificadas que amenazan la consecución de nuestro objetivo mayor, es importante hacer ajustes, revisar la planificación, reasignar recursos, contratar ayuda externa, asesorarnos con otros profesionales, mitigar los riesgos y definir una nueva estrategia.
  5. CELEBRAR LOS EXITOS Y REPASAR APRENDIZAJES. Cuando se ha culminado el proyecto u objetivo mayor, es importante felicitar el esfuerzo realizado por todo el equipo, hacer reconocimientos o menciones especiales, festejar juntos los logros conseguidos, repartir las utilidades o compensaciones y por supuesto repasar los aprendizajes, ver dónde se falló, donde hay oportunidad de mejora, en el proceso, en la comunicación, en la planificación o asignación de presupuestos o en la comunicación y entendimiento del verdadero significado del proyecto, y autoevaluarnos, medir el nivel de motivación que sentíamos al realizar el proyecto.

Y lo más importante, recordar que cuando trabajas por un bien mayor, todo esfuerzo vale la pena, te sientes útil en la vida y sientes que tu existencia contribuirá a dejar huella en esta tierra, además claro está de vivir momentos felices que nos llenarán de satisfacción día a día.

El hacer que tu trabajo y actividades diarias sean asertivas depende de ti, por lo tanto asegúrate de averiguar todas las variables, entender todos los contextos, preguntar todo lo que te hace falta hasta tener claro tu objetivo mayor, el resto, se irá construyendo con tu motivación y trabajo con pasión.

Si deseas ayuda en tu proceso de convertirte en una Ejecutiva de excelencia puedes contactarme a kleiva@mujerprofesionalonline.com

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